Las alianzas son necesarias para asegurar la permanencia y el crecimiento rentable pero escoger un socio no es tarea sencilla.
La ambición y la competencia son dos ingredientes necesarios y presentes en el mundo de los negocios.
Imagina una empresa que logra desarrollar una serie de productos muy necesarios e innova con una nueva manera de distribución que entusiasma a sus consumidores.
Al poco tiempo ingresa en el mercado un competidor con una propuesta similar que rápidamente alcanza una participación equivalente
La rivalidad entre éstas dos empresas se incrementó cada vez más. Una de ellas (la primera) invirtió mucho en la construcción de la marca y en desarrollo de productos.
La segunda creó una fuerza de ventas muy efectiva y logró acuerdos con grandes supermercados.
...invirtió mucho en la construcción de la marca y en desarrollo de productos.
Es muy importante para la primera empresa que ha invertido mucho en construcción de marca, la calidad de los productos. Por tanto ve con gran disgusto que los productos que vende su competidor directos capta gran parte del mercado con poca calidad.
Cuando la participación en el mercado doméstico hace poco posible permanecer en el tiempo para amortizar inversiones y gastos operativos continuos, una posibilidad puede ser asociarse con el rival y así sumar energías en un mercado externo.
Así queda presentado un dilema, una empresa hace foco en la calidad de los productos y otra en el crecimiento de participación de mercado pero lo que no tiene una; lo tiene la otra.
Entonces, si los responsables de ambas empresas se ponen de acuerdo; podrían competir en el mercado externo como una sola empresa con productos de calidad y aprovechando la muy buena fuerza de ventas de la otra. En cuanto al mercado local, seguir compitiendo como hasta ahora.
¿Pero a qué decir que sí en el acuerdo y a qué no?
- Hay que aceptar que la competencia no es solo local, es necesario buscar sinergia.
- Acepta las fortalezas de tu competidor para conjugarlas a tu favor y ganar - ganar.
- Si bien el acuerdo es el camino, no aceptes lo que dañe tus valores o de la empresa.
- Sé flexible, las cosas no son blanco o negro; siempre hay grises.
Si bien el acuerdo es el camino, no aceptes lo que dañe tus valores o de la empresa.
Hoy la diferencia entre socios y competidores no es tan clara. Se puede cooperar en cierta parte de la cadena de valor para establecer un objetivo único.
La complejidad de las demandas de los consumidores actuales, hace que las empresas vean muy difícil satisfacerlos por sí solas y es ahí donde el acuerdo puedo beneficiar a las empresas.
Bien, espero te sea útil y compártelo en tus contactos
Fuerte abrazo!!!
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